Xplor Fuego: El Lugar Perfecto Para Viajar Solo

La Pregunta No Es Por Qué Viajar Solo    

Es, ¿por qué no hacerlo?

Nunca había tenido la oportunidad de aventurarme sola, pero ahora, después de haberlo vivido, puedo decir que ya no tengo miedo a repetirlo. Si te detienes a pensar un momento, realizar actividades solos, no es del todo malo; eres libre de hacer lo que TÚ quieras. Al superar el reto de emprender aventuras sin compañía, te independizas. Una excelente opción para intentarlo es Xplor Fuego, el lugar perfecto para viajar solo.

Fui a Xplor Fuego, un parque de aventuras nocturnas en la Riviera Maya de Grupo Xcaret. Mi experiencia comenzó desde que tomé el autobús para llegar al parque. Cuando estaba sentada, sentí la falta de alguien a mi lado para tranquilizar tantito los nervios, pero a falta de compañía: música. Todo el camino fue muy ameno, ya que me preparé mentalmente para una de las aventuras más emocionantes que he vivido, con una buena playlist estilo aventurero, ¡bajé del camión sintiéndome Indiana Jones!

El guía que nos acompañó durante todo el trayecto hasta nuestra llegada a Xplor Fuego. Nos comentaba sobre lo que es el parque, las actividades que podemos hacer, así como los alimentos y bebidas ya incluidos en la entrada. Para finalizar mencionó: “Aquí no hay caminos que seguir, ustedes son dueños de su tiempo y de las actividades que deseen realizar”, (punto para mí por ir sola).

Desde que íbamos camino al parque, el cielo se veía muy nublado y yo con mi lado humano un tanto negativo, pensé: “Seguro nos dirán que no podremos hacer nada por la lluvia”, y resultó ser todo lo contrario. En cuanto entras al parque hay una vibra emocionante que te enchina la piel, desde las antorchas encendidas que marcan la entrada, hasta los colaboradores que te reciben hacen que te olvides de cualquier preocupación y te enfoques en gozar la aventura.

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Al entrar puedes apreciar el ambiente de un verdadero cavernícola, tanto en los caminos de piedra, las estalactitas que te rodean y las hermosas cuevas sobre ríos cristalinos. Para complementar tu outfit, te entregan un casco que no deberás quitarte de la cabeza. Primero por seguridad y segundo, porque el casco tiene un chip con el que las cámaras de todo el parque pueden localizar tu posición y tomarte fotografías desde los mejores ángulos y escenarios. Punto a favor, no necesito pedirle a nadie que me tome fotos (yo: 2 – soledad: 0).

Claro que lo primero que quise hacer fue lanzarme de las tirolesas, ¡aquí está la más alta de todo Quintana Roo con 42 m! A pesar de que me dan miedito las alturas, ya estaba metidísima en mi papel de aventurera y no podía echarme para atrás. Me encaminé a la estación de seguridad de las tirolesas, donde te dan una breve explicación de cómo debes ir durante el recorrido y al mismo tiempo te colocan el arnés. Mi mente solo pensaba: THIS THING IS ABOUT TO GET REAL.

¿Qué puedo decir? La verdad una experiencia así, como dicen por ahí: “hasta no ver, no creer”. Realmente no hay palabras para transmitir la emoción de cruzar por el gran arco de fuego y la paz que se siente al volar sobre el paisaje de la selva nocturna. El final del circuito es lo mejor, ya que terminas en una tirolesa en forma de columpio con la que acuatizas dentro de un río subterráneo.

Cabe destacar que para el momento que finalicé las tirolesas, cayó la lluvia y súper fuerte, pero eso no me detuvo ni a mí ni a nadie dentro del parque. La actividad siguiente fue la de los anfibios. En pocas palabras, son vehículos todo terreno que te llevan por caminos entre la selva, puentes colgantes, cavernas y una cascada. Literalmente, mi papel de Indiana Jones se quedó corto, pues la adrenalina que sentí al manejar a oscuras por la selva con el chubasco cayendo, fue lo más Jurassic Park que he vivido.

Para tranquilizar mi rush de emoción, al terminar los anfibios me encaminé a las balsas. Aquí me quedó claro que Xplor Fuego es un lugar para viajar solo como yo. No solo te ofrecen una balsa individual, ¡también hay dobles! (yo: 3 – soledad: 0). La actividad consiste en un recorrido sobre una balsa donde remas con las manos usando paletas de remo, por un circuito de ríos subterráneos rodeado de extraordinarias formaciones rocosas con miles de años. La experiencia es increíble y el ejercicio de brazos, brutal.

Para finalizar, ya la panza me estaba rugiendo cual cavernícola y me fui directo al restaurante Troglodita. Amigos, NO EXISTE UNA CENA BUFFET IGUAL, no existe. Hay platillos mexicanos, barra de ensaladas, guarniciones, cortes de carne, costillitas, snacks, pastas, postres y mucho más. Deja tú la variedad, EL SABOR es exquisito, y sí, salí rodando después de tres platos.

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En fin, viajar solo es una experiencia que es necesario hacer por lo menos una vez al año. Te ayuda a conocerte y te anima a realizar cosas diferentes. También te motiva a hacer nuevas amistades  y a salir de tu zona de confort. Xplor Fuego es un parque recomendadísimo para todo tipo de viajeros: familias, parejas y amigos. Sin embargo, te aseguro que una cosa es experimentarlo acompañado y otra muy diferente es hacerlo solo… ¡No tengas miedo y atrévete a vivir algo diferente!